Como ya expliqué con anterioridad, el Internet de las Cosas (IoT) es un concepto sencillo: vamos a hacer nuestros productos inteligentes. Mediante la implantación de microchips y sensores con conexión a internet, llenaremos nuestra vida de productos conectados, ya sean prendas de vestir, la cadena de producción de una fábrica o el sistema de riego de un jardín. ¿Cómo se relaciona esto con el Big Data?
Generación masiva de datos
Por tanto, una de las consecuencias de la llegada del IoT es la generación de datos. Esos datos, provenientes del mencionado aumento del número de dispositivos conectados deberán ser gestionados no tanto por los usuarios sino por las empresas. A ellas se refería Howard Baldwin escribiendo en Forbes: «Vamos a tener datos arrojados desde todas las direcciones: desde aplicaciones, desde maquinaria, desde las vías de un tren, desde contenedores de transporte, desde centrales de energía. Si eso no os pone a pensar como gestionar esos proveedores de datos en tiempo real, nada lo hará.»
La buena noticia es que el Internet de las Cosas se está implantando de manera progresiva y todavía no ha comenzado a producir una cantidad escandalosa de datos, a cuya gestión precisamente se dedica el Big Data.
La consolidación del Big Data
Según lo define IBM, Big Data es la tendencia tecnológica basada en el análisis masivo de datos que no pueden ser procesados o analizados utilizando herramientas tradicionales (es decir, que generalmente tienen que ser gestionados por una plataforma específica para ellos). A diferencia del IoT, el Big Data lleva entre nosotros desde hace algún tiempo.
Por un lado, existen herramientas analíticas designadas para la gestión y análisis de grandes volúmenes de datos e información. Estas herramientas con el paso del tiempo se han vuelto más accesibles para las pequeñas y medianas empresas.
Por otro lado, la gestión y el análisis de datos se ha convertido en uno de los campos de estudio más valorados y solicitados de los últimos tiempos. Ejemplos de puestos de trabajo (especialmente en EEUU) relacionados con esta ciencia son «Big Data engineer», «data curator», «Big Data portfolio leader», «Big Data architect» o «director of analytics».
Preparando el camino
Tener capacidad de reunir y gestionar datos gracias al Big Data es un requisito básico para la llegada del IoT. De hecho, sin una correcta estructura de Big Data en la empresa, la implantación del IoT se antoja complicada, ya que no vale de nada generar datos de alto valor tanto para empresas como para usuarios si no se pueden gestionar y analizar de manera correcta.
En España, tan solo empresas grandes como por ejemplo Telepizza con su botón Click&Pizza o Telefónica con su plataforma Thinking Things están apostando por el Internet de las Cosas de manera visible. Mientras despega, el resto de empresas deben cuanto menos prepararse para adoptar una estrategia de Big Data.
Sin Big Data, el Internet de las cosas no será más que algo en nuestra imaginación.